QUILATE, de principio a fin

Un espectador que minutos antes se había detenido en el cuadrilongo para ver saltar en libertad a los potros de dos años, no pudo contener la emoción y aplaudió lo que había visto. El público, que en la grada se habían reprimido, solo entonces se sumó a aquel aplauso, lo que despertó la curiosidad y […]
